Vistas de página en total

martes, 25 de diciembre de 2012

Queridos papá y mamá:

Sé que a veces soy un tanto insoportable, que se me cruzan los cables y digo cosas sin pensar, que la cago continuamente y os hago daño sin siquiera darme cuenta, así que lo primero de todo, quiero pediros perdón, por todos los malos ratos, y todo lo que habéis tenido que aguantar por mi culpa.
Quiero también daros las gracias, porque aunque no suela decíroslo mucho, si estoy aquí, orgullosa de mí misma, de cómo soy , de cómo pienso, con las ideas tan claras, es, en parte, gracias a vosotros, que me habéis enseñado a aprender de los errores, a superar cada obstáculo e, incluso, a superarme a mí misma.
Ambos dos sois un ejemplo a seguir, y lo digo en serio, estoy muy orgullosa de que vosotros seáis mis padres, aunque puede que a veces no lo parezca.
Que puede que tenga solo 15 años, pero durante esos 15, vosotros habéis estado ahí cada día, viéndome crecer y ayudándome a hacerlo, apoyándome, cuidándome y protegiéndome, porque sé que por muchos años que cumpla, siempre seré vuestra pequeña, y esa pequeña hoy está escribiendo esto para recordaros lo  muchísimo que os quiere. Gracias por este año, y por todos los demás.
Os quiere mucho: vuestra pequeña Ariadna.

domingo, 9 de diciembre de 2012

No rendirse, por muy difícil que parezca.

Cuando no sabes ni cómo mierda empezó todo, ni por qué, cuando solo sabes que, de repente, un día te levantaste necesitando sus 'buenos días amor', que empezaste a darte cuenta de que tu estado de ánimo depende de cómo estés con él. Solo sabes que te hace sentir no grande, gigante, que sabe sacar lo mejor de ti, que te hace sonreír con cualquier gilipollez, con cualquier tontería, que si dejáis de hablar durante un tiempo te sientes incompleta, y que cuando volvéis a hacerlo crees ser la persona más feliz del mundo. Todos dicen que es amor, que te estás empezando a enamorar, 'déjate llevar' dicen algunos, 'no lo hagas, para esto ya, vas a acabar mal, como siempre', piensan otros. ¿Pero y tú? ¿Tú qué piensas? Pues no lo sabes, ni tú misma lo sabes, piensas que no se puede frenar un sentimiento, que es inútil siquiera controlar lo que uno siente, así que decides que lo mejor será hacer eso, dejarte llevar, y, si acabas mal, como siempre, pues, al menos, no te quedarás con la duda de si pudo o no pudo funcionar. No pienses en rendirte sin haber siquiera empezado a luchar.